La peor combinación de alimentos que se puede dar en una misma comida son los glúcidos suculentos(patatas, arroz o pan) con proteínas animales y aún así constituye el plato fuerte de las dietas occidentales: hamburguesas con patatas fritas, huevos fritos con patatas fritas…
- Para iniciar la buena digestión de cualquier proteína animal, el estómago debe segregar pepsina, que solo puede actuar eN medio sumamente ácido (pH5) que se debe mantener durante varias horas hasta la completa digestión de las proteínas. Cuando tomamos un trozo de pan, por ejemplo, las glándulas salivales segregan inmediatamente ptialina y otros jugos alcalinos, una vez que hemos tragado el alimento, la fécula alcalinizada necesita hallar en el estómago un medio alcalino para completar su digestión.
- El estómago, en respuesta a la presencia de proteína y féculas segrega al mismo tiempo jugos ácidos y alcalinos que se neutralizan entre sí y dejan una solución acuosa incapaz de digerirse correctamente. Las proteínas se pudren entonces y las féculas fermentan mal debido a una recurrente presencia de bacterias en el canal digestivo.
- Los nutrientes de las proteínas entonces no son aprovechados, produciendo desechos tóxicos y gases fétidos y venosos.
- CONCLUSIÓN: CONSUMIR LAS PROTEÍNAS ANIMALES SEPARADAS DE LOS HIDRATOS DE CARBONO COMPLEJOS (PATATAS, ARROZ O PAN) O TOMARLA EN CANTIDADES MUY PEQUEÑAS O ALGO TOSTADO.