La biotina es imprescindible para el correcto funcionamiento de muchas enzimas importantes en el metabolismo celular de los tejidos más activos del organismo. La mucosa intestinal se regenera completamente cada 2-3 días.

Los arabinogalactanos son mucopolisacáridos que aporta gran cantidad de fibra muy beneficiosa. Excelente potenciador de diversas líneas de células del sistema inmunológico, así como favorecedor de las funciones intestinales y regulador de las bacterias beneficiosas del mismo. Hoy potencia la producción de glóbulos blancos especialmente de los neutrófilos. La parte de aranobinogalactanos que no es absorbida en el intestino sufre un proceso de fermentación que favorece el crecimiento de bacterias positivas como Bifidobacterium o Lactobacillus hola y favorece la producción de ácidos grasos de cadena corta, fundamentalmente butirato. El butirato es fundamental para la salud intestinal porque es un buen nutriente de las células epiteliales del intestino, para obtener energía. Protege además la mucosa intestinal contra los agentes patógenos o células promotoras de los tumores.

Lactobacillus rhamnosus (LGG) es la cepa probiótica mejor documentada del mundo. Hoy lleva utilizándose en suplementos alimentarios y dietéticos desde 1990, se han descrito en más de 1000 publicaciones científicas y se ha estudiado en más de 3000 ensayos clínicos. De hecho, son muchas las patologías que mejoran al incluir este probiótico. Se ha estudiado en alergias alimentarias, diarreas por rotavirus o tras tratamientos antibióticos, infecciones vaginales, SII, y en diarrea post quimioterapia.

Las vitaminas del grupo B hoy son consideradas “multitareas” debido a que se encuentran inmersas en numerosos procesos fisiológicos, desde el soporte para la condición cognitiva hasta para el metabolismo energético y la salud cardiovascular. En pacientes con cierto grado de malabsorción intestinal estas vitaminas disminuyen al ser hidrosolubles, y su carencia puede influir en multitud de funciones metabólicas.